¿Sabías que una buena planificación y los productos más adecuados hacen mucho más sencilla una buena limpieza general en casa? ¡Esperamos que sí lo supieras! Y es que ya te lo contamos en este artículo. De hecho, uno de los matices más importantes es que la última parte de este particular ‘zafarrancho’ son las ventanas y el suelo. Precisamente nos alegra de forma especial que se tengan en cuenta las ventanas, cuya limpieza es muy sencilla, y además realmente importante para disfrutar de mucha luz solar y un ambiente ideal en casa.
¡Te contamos 11 cosas que debes saber acerca de limpiar las ventanas!
- Para que el trabajo no se duplique y se convierta en algo eterno, sigue este orden: primero los marcos, pasas después a la cara interior de la persiana y rematas con los vidrios.
- ¿Por qué especificamos que solo la cara interior de las persianas? Porque solo tienes que bajarla del todo y pasar un paño húmedo para dejarla impecable. En cambio, es evidente que la cara exterior es mucho más complicado. Tendrías que tener acceso al hueco en la que se instala, hacer la limpieza en altura, etc. Mejor que se la dejes a un profesional.
- Debes ser muy consciente de los materiales que componen tus ventanas. A la hora de elegir los productos adecuados no es lo mismo la madera que una ventana de PVC.
- El aluminio gris y blanco se pueden limpiar con un paño húmedo y unas gotas de detergente. También el PVC.
- Para la madera lo mejor es un producto específico de superficies barnizadas.
- ¡No limpies nunca el polvo o la suciedad con un trapo seco! Esto podría dejar marcas en las superficies.
- Las ventanas de aluminio las puedes secar con papel. En cambio, las de PVC lo hacen perfectamente al aire.
- Los vidrios, por supuesto, se pueden limpiar con el producto limpiacristales que compras habitualmente en un supermercado.
- Como en cualquier limpieza que se precie, empieza por arriba y vas bajando. De lo contrario, haces doble esfuerzo.
- Si utilizas una esponja porosa para la limpieza, usa dos cubos: uno con agua limpia y otro para escurrir. O un pulverizador y un solo cubo para escurrir. ¡A tu gusto!
- ¿Sabías que algunas cosas que siempre tienes por casa pueden ser de gran utilidad? Entre los remedios caseros más recomendados está usar una mezcla de vinagre con agua caliente (1 parte por 3 de agua) y utilizar papel de periódico en vez de paños. Puede resultar útil, aunque nosotros siempre recomendaremos los productos específicos, que para eso se diseñan y se prueban.
¿Una vaporeta para limpiar los cristales?
Es el consejo con el que cerramos este artículo. ¡Hay muy pocas cosas que se le resistan al vapor! Es una técnica de cocina increíble (¿has probado a cocinar tus recetas favoritas en un horno de vapor?), y además un desinfectante natural, ecológico y más que eficaz: elimina al 100% bacterias y hongos.
Una vaporeta de mano para limpiar las ventanas es algo que nunca falta entre el equipamiento de una empresa de limpieza profesional. Y es que un buen chorro de agua a presión se ocupa de fulminar hasta la suciedad más rebelde. Y la mejor noticia es que, efectivamente, se trata de una herramienta más a tu alcance que nunca. ¡No te arrepentirás de hacer esta compra!
