Hace ya unos cuantos años que el blanco dejó de ser el rey de los colores en la decoración de las casas. Ahora la gente apuesta sin miedo por otras tonalidades, aunque en ocasiones sus gustos personales chocan con la estética de la fachada. Y es que no podemos olvidar que las ventanas se ven por dentro y por fuera.
Conscientes de este asunto y con la intención de que ningún amante de un color se quede con la miel en los labios, los fabricantes hicieron lo que debían: hoy puedes elegir sin problemas unas ventanas de PVC o aluminio bicolor, cuyo precio final, que también preocupa mucho a los clientes que las buscan, depende mucho del tipo de proyecto.
Dicho esto, la pregunta del millón es obvia: ¿cómo se consiguen unas ventanas bicolores? Te lo contamos ahora mismo.
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Foliado de ventanas
Para lograr que unas ventanas de PVC sean bicolor, es decir, que luzcan de un color por dentro de casa y de otro por fuera, los fabricantes tienen a su alcance algunas herramientas interesantes como el foliado de ventanas. Si queremos que sean de dos colores, las ventanas de PVC no pasan por un taller de pintura, sino que aplicamos esta técnica mediante la cual se aplica una capa decorativa del color que quieres sobre el propio perfil para dar el toque de personalización buscado y así respetar las normas estéticas de la propiedad sin renunciar al gusto personal.
Tal y como explican nuestros compañeros de HOCO, lo más habitual es que se folien ventanas para simular un acabado de madera, algo relativamente fácil porque se imita directamente la veta real de este material.
Lacado de ventanas
En cambio, el aluminio sí que permite una capa de pintura si lo que estás buscando es una ventana bicolor. El mejor ejemplo lo encontramos, como siempre, en K•LINE y su gama bicolor con hasta 29 tonos diferentes para dar a las ventanas de aluminio el relieve que quieres o te exigen para la fachada.
A nivel técnico, el lacado consigue un acabado uniforme y de altísima calidad que mejora notablemente el aspecto de las ventanas tratadas. Tras la pintura llega un proceso de secado, así que el resultado es liso y da la impresión de ser el color original del aluminio.
Debemos recordar que, además, proporciona una protección adicional contra la corrosión, el desgaste y la decoloración de las ventanas, ya que la pintura actúa como una especie de barrera protectora que previene posibles daños.
«El color es esencial para mejorar tu casa e imprimirle carácter; también es un elemento fundamental para la decoración de interiores», explican desde la web de K•LINE, que pone a nuestra disposición –como distribuidores oficiales en Aragón de la marca– una gama de hasta 29 colores distintos para el exterior. Entre ellos figura, evidentemente, el blanco, que a pesar de haber sido destronado como el color único del diseño de interiores, sigue siendo el favorito de muchos porque da mayor libertad a la hora de elegir la decoración final de cualquier vivienda.
¿Conocías la posibilidad de lacar o foliar ventanas? ¿Buscas una ventana de PVC bicolor al mejor precio? ¿La gama K•LINE bicolor te tiene enamorado? Sean cuales sean las respuestas, sobre todo en el caso de las dos últimas preguntas, cuenta con nosotros. En Cerramientos Integrales te ayudamos a tener las que siempre has querido.
